Escritor y periodista Jens Liljestrand junto a su libro, durante su presentación.
La biblioteca central de Estocolmo anunció para el pasado 23 de enero una conferencia del periodista Jens Liljestrand, sobre la figura del escritor sueco Vilhelm Moberg. El espacio se aprovechó por Liljestrand para hablar de su tesis doctoral defendida en la universidad de Lund, con el titulo Mobergland – personligt och politiskt i Vilhelm Mobergs utvandrarserie. (Mobergland - personal y político en la serie de los emigrantes en Vilhelm Mobergs).
Cuando vi el afiche en la biblioteca pensé es que haría todo lo posible para estar ahí. En el tiempo que llevo aquí en Suecia ya me he leído algunos de sus libros y las historias me parecen muy buenas. Muchas de esas historias describen la causa de por qué cientos de miles de suecos se aventuraron a cruzar el Atlantico en busca de una vida mejor en el continente americano. Situación que en cualquier cubano la podría reconocer en lo que ha vivido en su país.
Vilhelm Moberg fue un periodista, escritor e historiador sueco, nació en 1898 en la entonces pobre región de Småland, en donde experimentó los flagelos de la pobreza. Fue un consecuente socialdemócrata, antimonárquico y republicano. De Moberg hay mucho para decir, como intelectual y como hombre de ideas, consecuente con la libertad y la democracia. Liljestrand muestra en su conferencia un Moberg que vivió cierta marginación en Suecia por su posición crítica de la socialdemocracia sueca que por un lado negociaría con el régimen nazi y más adelante mostraría abiertamente su admiración por Stalin y la Unión Soviética.
Jens Liljestrand en su conferencia no dejó pasar por alto la obra cumbre de Moberg, la serie Los Emigrantes, y a los dos principales personajes, Karl-Oscar Nilsson y su esposa Kristina, para hacer una especie de critica a partir de las teorías de genero. Dos personajes que han quedado como el paradigma de la idiosincrasia sueca. Paradigma enraizado en el matrimonio, al que hoy día se le llama por tradicional.
Del musical “Kristina från Duvemåla” (Kristina de Duvemåla) inspirado en los Emigrantes de Moberg. Cuenta con la dirección de los músicos Benny Andersson y Björn Ulvaeus, integrantes del grupo ABBA.
Por aquí viene uno de los cuestionamientos que Liljestrand le hace a la obra de Moberg, ya que el matrimonio no sólo se presenta como una fuente de realización humana, sino también de felicidad. Liljestrand advierte que en la obra de los Emigrantes los hombres casados se proyectan como estables y felices, en comparación con los solteros que no logran una estabilidad como persona, ni logran terminar felizmente en la obra.
Por su puesto que Moberg no se queda atrás, ya que el mismo Liljestrand considera que desde una perspectiva moderna sería un machista. Y puede ser cierto cuando se mira el matrimonio de Moberg, al que se le llamaría de tradicional, y del que resultó cinco hijos. Que Liljestrand haga ese tipo de enfoques no es nada extraño ya que en su obra periodística, por ejemplo, existen precedentes de este tipo. Ejemplo de ello es el trabajo “Made in pride. Ett reportage om det rosa kapitalet” ( Hecho en pride. Un reportaje sobre el capital rosa), en el que desarrolla la idea que movimiento gay ya no se desarrolla hacia la aprobación de leyes que lo favorezcan, sino hacia la dirección del mercado.
Realmente la perspectiva con que Liljestrand mira la obra de Moberg no es nada nuevo, ya hay otros trabajos de ese tipo realizado anteriormente. Entre estos está el trabajo de Ola Holmgren, catedrático en literatura de la universidad de Södertörn, en Estocolmo, que tiene como titulo "Emigrant i moderniteten. Vilhelm Mobergs manfantasier" (Emigrante y modernidad. Las fantasias masculinas de Vilhelm Moberg). Trabajo del cual más adelante haré una recensión.
No quisiera terminar sin antes referirme a que el público mayoritariamente estaba conformado por jubilados. Es una pena que una personalidad tan representativa para Suecia, su cultura y su idiosincrasia no despierte el interés entre los jóvenes. Yo pienso que la razón es por que un intelectual como Moberg nunca fue para su país un intelectual políticamente correcto y esto haga que no se le promueva como a tantos otros. Algo que sería bueno ver más de cerca y contrastarlo con los principios del arte y la literatura en los países libres, cómo Suecia por ejemplo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario